Francisco Tellez es un psicólogo voluntario en la Fundación Cerro Navia Joven y, en esta oportunidad, ha compartido su perspectiva social sobre el voluntariado en las fundaciones. Sobre su motivación para integrarse al espacio comunitario de Cerro Navia Joven dijo lo siguiente:
“Me motivó ser psicólogo en la FCNJ el poder aportar en algo a aliviar los problemas de salud mental en personas que tienen dificultades para acceder a tratamiento en la red pública y privada. Asimismo, valoro aprender de la gente con la que trato y ayudo, ellos pueden ampliar la mirada que uno tiene de la realidad y te entregan nuevos criterios para la práctica profesional.”
Sin embargo, la motivación profesional que despierta en los voluntarios proviene de un llamado a la acción pública y social que se produce por un criterio particular en cada quién. Sobre lo anterior, Francisco estableció que:
“La acción pública y social voluntaria que tiene que ver con hacerse cargo de los problemas de las personas que debieran ser beneficiados por las políticas sociales (salud, educación, vivienda, etc.) , y que las instituciones públicas no pueden o no alcanzan a dar una respuesta adecuada. Los servicios que prestan voluntarios/as son muchas veces impagables o no accesibles por las personas beneficiarias de esos servicios. Sin un voluntariado al servicio de comunidades de escasos recursos, se amplían las brechas entre los grupos más acomodados y los más vulnerables de la sociedad. Las organizaciones que tienen una vocación social y cuyo funcionamiento muchas veces depende de la colaboración de voluntarios, se constituyen en actores fundamentales para mejorar la calidad de vida de una parte importante de la población en una situación de vulnerabilidad económica y social”
Sobre su labor particular en la fundación, Francisco nos comparte algunos de los proyectos que lleva a cabo:
“Llevo un año trabajando como psicólogo en la Fundación, haciendo psicoterapia para adultos, tarea que no se realizaba antes. Durante el tiempo que he colaborado con la Fundación, he percibido que hay un número importante de personas con necesidad de recibir apoyo psicoterapéutico y que nunca tuvieron la oportunidad de acceder a dicho apoyo. He atendido a personas de la tercera edad que por primera vez en su vida le cuentan sus problemas a otra persona. Es evidente que aquí se puede hacer un gran aporte y que se requieren de más profesionales de la salud mental que colaboren con la Fundación haciendo psicoterapia.”
En el cierre de la entrevista, Francisco hace un llamado a todos sus colegas y profesionales en general, a abrir un espacio para la acción pública y social voluntaria:
“A la comunidad profesional es diría que hay mucho por hacer y que se requieren muchos profesionales que, de buena voluntad, regalen parte de su tiempo para colaborar en organizaciones como la Fundación Cero Navia Joven. Este es un área de trabajo que requiere mucha entrega, sobre todo para las personas que lo coordinan, pues tienen que aprender a trabajar con las comunidades en las que se insertan, de manera de conocer bien sus problemas sin imponer soluciones; conseguir los escasos recursos que hay disponibles tanto en el sector público como en el privado; ser creativos para maximizar el uso de esos recursos, intentando cumplir con los objetivos de coberturas y de calidad de los programas que administran. Pero para que estas instituciones se sostengan en el tiempo, requieren del trabajo voluntario.
Animo a las y los profesionales interesados en ser voluntarios, a entregar parte de su tiempo en una institución que les merezca confianza, una organización o fundación que crean que hacen las cosas seriamente y realmente preocupados por la comunidad a la que sirven.”
